La región de Centroamérica y Caribe (CA) presenta una elevada amenaza sísmica condicionada por el contacto de placas de Norteamérica, Cocos y Caribe que convierten a la zona en una de las sísmicamente más activas del mundo. Confluyen en la región tres tipos de escenarios sísmicos asociados a: 1) la subducción de la placa del Coco bajo la placa Caribe, 2) las fallas locales alineadas con la cadena volcánica y 3) el contacto Norteamérica Caribe, con un gran sistema de fallas transcurrentes que se extiende desde las fallas de Motagua, Chixoy, Polochic y Swan en CA, hasta las zonas de fallas Enriguillo-Plantain Garden y Septentrional-Oriente en La Española.
En el proyecto RESIS II, financiado por el Gobierno de Noruega entre los años 2007 y 2012, se desarrolló un estudio completo de amenaza a nivel regional para toda CA, con participación de las principales instituciones responsables del monitoreo sísmico de los seis países del área, además de NORSAR (Noruega) y la Universidad Politécnica de Madrid (UPM).
En este coloquio, organizado por el Instituto Hondureño de Ciencias de la Tierra (IHCIT), Belén Benito presentó un resumen de los principales resultados obtenidos en estos proyectos que constituirán una buena base de datos de partida para enfocar nuevas investigaciones.